Cuando no existían antes tantos avances, la única forma de saber si una perra estaba o no embarazada era esperando dos meses y viendo su evolución para ver si, al final, había o no perritos.
Sin embargo, hoy en día esto no es así y podemos encontrar dos modos de saber si vamos a ser «abuelos».
La primera de ellas es mediante un análisis de sangre. Esto método no es fiable al 100% pero sí nos puede decir casi con seguridad si está o no preñada.
La segunda, mejor opción y que nos da más información, es mediante una ecografía. Con ella podemos intentar (como con los bebés) saber si está preñada y cuántos perritos puede llegar a tener. No es una opción más cara que el análisis, llega a salir por lo mismo que el análisis de sangre o incluso menos.
muy interesante, hay poca informacion sobre embarazos de perros en la web.